Las mujeres no hemos tenido muy buena relación con el poder, y es que, aunque queramos tenerla, la realidad es que nuestro contexto no nos lo pone sencillo.

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Estaremos de acuerdo en que el poder está totalmente masculinizado. 

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¿Si tuvieras que imaginarte a una persona poderosa, qué características tendría?

 

Probablemente... ¿sería hombre, blanco, mediana edad y con traje? bingo. El poder parece no pertenecer a las mujeres, porque siempre nos han contado que el poder es cosa de hombres. Ellos, al fin y al cabo, dominan la mayoría del espacio público, y toman decisiones sobre toda la población, también sobre nosotras. Nuestras vidas, nuestros trabajos, nuestros cuerpos.

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Empoderarse es concer y conocerse, tener la información en nuestra mano para poder pasar a la acción. Empoderarse va de crear consciencia, de abrir los ojos. De despertar.

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¿Vienes?